Hasta que nos volvamos a encontrar es la primera película peruana que ha producido Netflix. La cinta consiguió en su primera semana más de 12 millones de horas de visualizaciones y se situó como una de las 10 emisiones más vistas en América, Europa, Asia y África. En la segunda semana, también obtuvo resultados muy destacados. Ver la película es la excusa perfecta para promocionar los viajes a Perú.
Con Hasta que nos volvamos a encontrar, los espectadores pueden disfrutar de mucho más que una comedia romántica. Es una obra que fusiona el romanticismo con localizaciones de ensueño en el país andino y permite adentrarse en muchas tradiciones peruanas. Te mostramos con detalle algunos escenarios reales de la película, para que incluyas como una posible opción la luna de miel en Perú.
En Viajesdq, podeís encontrar toda la información relativa de este maravilloso destino Perú.
Cusco, el Mirador de la Plaza de Armas
Cusco, o Cuzco, es un destino imprescindible en el país andino. Es una ciudad ubicada al sureste de Perú, enmarcada en la vertiente oriental de Los Andes. Además de ser la capital histórica, fue la ciudad más importante del Imperio Inca y un lugar imprescindible durante el Virreinato del Perú.
En la película aparece una panorámica de Cusco desde el mirador de la Plaza de Armas, cuando Salvador (el personaje interpretado por Maxi Iglesias), muestra a su padre a través de un vídeo el lugar donde quiere construir el hotel de la empresa familiar.
El nevado de Salkantay
Precisamente desde Cusco parte uno de los itinerarios más famosos del país, y que también está presente en la película. En muchos viajes a Perú el Camino del Inca es protagonista absoluto.
En Hasta que nos volvamos a encontrar, Ariana (Stephanie Cayo) es una intrépida joven que quiere descubrir todo lo que puede ofrecer Perú con sus paisajes, su biodiversidad y su historia. Ella se introduce en el Nevado de Salkantay, la alternativa al Camino del Inca, en un trayecto que le ocupa cinco días y que también tiene como destino final el Machu Picchu. En el apartado de viajes por destino, encontrareis varios itinerarios similares a los de la pelicula, como Salkantay Trek a Machu Picchu
La laguna de Humantay
Salvador y Ariana, que emprenden juntos su camino hacia Machu Picchu, descubren en la ruta la laguna Humantay. Es un imponente lago de aguas turquesas localizado en la cordillera de Vilcabamba.
Su formación se debe al derretimiento de los glaciares Humantay y Salkantay, a más de 5000 metros de altitud. Es uno de los atractivos naturales más impactantes de Perú. Está situado en el departamento de Cusco y es muy accesible. Para llegar hasta el lago basta con realizar una cómoda caminata entre llamas, colinas, arroyos y alpacas. Es una ruta alternativa al camino del inca, cuando no existe disponibilidad en este o buscais algo diferente.
Las aguas termales de Santa Teresa o aguas calientes de Cocalmayo
Conocidas por diferentes denominaciones, los baños termales de Cocalmayo son unas piscinas al aire libre situadas entre un enorme río y una pequeña montaña. Los bañistas disfrutan de aguas termales en Cocalmayo rodeados de vegetación y el río Urubamba.
Las piscinas tienen una temperatura que oscila entre los 38 °C y los 44 °C. A su vez, son aguas termales muy claras, a diferencia de otros atractivos similares en Perú. Su cercanía al pueblo de Santa Teresa explica su otro nombre. En la película de Netflix, Ariana y Salvador vuelven a tener un encuentro íntimo en estas piscinas.
Huayna Picchu, el hermano oculto y desconocido de Machu Picchu
La Montaña Joven, así es conocida Huayna Picchu. Este emplazamiento es infinitamente menos conocido que Machu Picchu, pero siempre le acompaña. Se trata de la montaña que aparece detrás de la Ciudad Inca en las habituales fotos de postal.
Ofrece senderos cortos de excepcional belleza, pero de tremenda dificultad por su estrechez y elevada pendiente. Completarlos no es una opción para las personas que sufren de vértigo. En Hasta que nos volvamos a encontrar los protagonistas de la película intentan visitar el Templo de la Luna, uno de los lugares sagrados de los incas.
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La Isla de los Uros
Es una isla, pero continental. En lugar de estar rodeada por agua salada, lo está por agua dulce, la del lago Titicaca. Los Uros es un pueblo flotante formado por plataformas de totora cerca de la bahía de Puno. Islas flotantes artificiales habitadas por los uros, un pueblo ancestral de Perú que vive en medio del lago navegable más alto del mundo.
Salvador, al final de la película, intenta buscar a la desesperada Ariana en ese lugar. Los uros fueron una de las culturas pioneras en el Altiplano, hasta el punto de que su origen como civilización se remonta a la época preinca.
Paracas
En el final de Hasta que nos volvamos a encontrar ocurre una de las escenas más románticas entre los dos protagonistas en Paracas. Esta localidad peruana de Pisco, en el departamento de Ica, es muy conocida por su balneario, las playas, la gastronomía asociada al mar, la industria pesquera y su atractivo natural. Otro lugar interesante para incluir dentro de los viajes de novios a Perú.
Hasta que nos volvamos a encontrar posiblemente no pase a ser recordada como una de las grandes películas de la historia, pero siempre será la primera cinta peruana de Netflix. Además, visionarla es la excusa perfecta para interesarse por viajes a Perú.
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